Ya llega fin de año, es época de balances, de hacer un detalle minucioso de ganancias y pérdidas.
Nos dice el Allamano que en las ganancias ubiquemos todas las gracias recibidas
¿Sos de los que piensan que fueron pocas? No, te pido que revises bien tu lista ¿estás seguro que pusiste todo? Fijate, revisá con atención. Tomá papel y lápiz y empezá a anotar. ¿Viste como se hace cada vez más larga? Es que nos distraemos tanto completando la lista de problemas que no prestamos atención a las cosas que realmente importan.
¿Pusiste los amaneceres y/o las puestas de sol que disfrutaste con los que amás?
Y esos momentos de charla con amigos y la compañía del mate ¿los anotaste? ¡¡¡No te olvides de las sonrisas que te regalaron tus hijos, nietos, los chicos del barrio o simplemente algún niño que tuviste la dicha de abrazar!!!
Los abrazos tienen que tener un lugar privilegiado en esa lista. Dicen los que saben que mientras más abrazos damos y recibimos más rápido sanan algunas heridas, así que, ¡anotalos!
Dale, seguí vos y por cada cosa bella que escribas poné al ladito un GRACIAS SEÑOR así de grande.
Agradezcamos al Señor todo lo que hemos vivido en este 2011, incluso aquellas cosas que no nos gustaron demasiado pues “en la mente de Dios también fueron gracias”, nos enseña el Allamano.
Y en este ejercicio de aprender siempre de sus enseñanzas, es bueno que meditemos este pequeño fragmente del libro “Los quiero así”:
...No pensemos más en el pasado, el presente está en nuestras manos... Si no estamos atentos en responder a la gracia de cada uno de los momentos que componen el año, no podemos volver atrás para recuperarlo, como el tiempo, la gracia que no sabemos recibir en su momento, se pierde para siempre.
Por eso está bien recordar, anotar y dar gracias.
Si generamos el hábito de reconocer las cosas bellas que nos suceden diariamente, estaremos siempre felices por lo que nos toca vivir y agradecidos por tantas bendiciones.
Empecemos el año con energía y de igual modo todos los días, cada momento, sin desanimarnos nunca. Este es el espíritu con el que tenemos que emprender el nuevo año. Esperemos llegar al final del año agradeciéndolo, así como hemos agradecido el año que pasó. Esto también nos lo dice el Beato Allamano.
Queridos hermanos laicos:
GRACIAS por compartir este año tantas cosas lindas (por medio del blog).
GRACIAS a quien hace posible esto (Marcos un tipazo!).
GRACIAS Mendoza Guaymallén por hacernos empezar el 2011 tan maravillosamente.
GRACIAS a Mendoza Parroquia por demostrarnos que "se puede".
GRACIAS a los hermanos de Jujuy , por preparar el próximo encuentro con tanto esmero.
GRACIAS Pirané por lo vivido junto a ustedes.
GRACIAS padres Daniel y Luis por este tramo de nuestra vida como laicos que compartimos.
GRACIAS BEATO ALLAMANO por tus enseñanzas.
GRACIAS MADRE CONSOLATA por tu amor y tus cuidados.
GRACIAS SEÑOR por llamarnos para servirte.
Que tengan un feliz año nuevo, es mi deseo y el de mis hermanos laicos de Martín Coronado.
LaicosMartínCoronado
Adriana Rojas lmc
0 comentarios: (+add yours?)
Publicar un comentario